Un hombre de 81 años falleció el sábado a causa de sus graves heridas en la clínica de Innsbruck tras caerse mientras esquiaba en Ischgl, en el Tirol (distrito de Landeck). El hombre había caído el día anterior sin ninguna influencia externa. Durante el primer tratamiento realizado por el equipo de rescate en pista todavía se encontraba bien, pero luego su estado empeoró y el hombre de 81 años tuvo que ser trasladado en helicóptero a la clínica.
Finalmente murió allí el sábado. Según la policía, resultó que el anciano ya se había caído el miércoles pasado en la estación de esquí sin que fuera culpa suya. El casco de esquí resultó dañado.