Tyson Fury siempre ha sido el maestro de la transformación, pero reinventarse después de su primera derrota ante Oleksandr Usyk por el título indiscutible de peso pesado en mayo ha supuesto el mayor desafío de su vida deportiva. Fury ahora regresa al ring en Arabia Saudita el sábado por la noche como un perdedor y, aunque el hombre de 36 años ha tenido revanchas antes, el escenario, y el propio autodenominado ‘Rey Gitano’, es completamente diferente esta vez.