Fue una noticia que conmocionó a muchos en el mundo del montañismo: el 25 de mayo de 2023, Luis Stitzinger falleció mientras descendía su décima cumbre de los ochomiles, el Kangchenjunga (8.586 metros). Escalar la tercera montaña más alta del mundo sin oxígeno embotellado y bajarla esquiando había sido el sueño de toda su vida. El alpinista extremo de Algovia, que entonces tenía 54 años, se había ganado una gran reputación y respeto con sus expediciones y pistas de esquí como el Nanga Parbat (8.125 metros) y el K2 (8.611 metros). Como guía de montaña, llevaba a sus clientes a los picos más altos del mundo. Impresionó a muchos de sus compañeros por su calidez, su actitud realista y su pura alegría por el montañismo. Su esposa y compañera de montaña, Alix von Melle, ha escalado con él innumerables cimas; el alpinista profesional de 53 años ha escalado con él seis de sus siete ochomiles. El pasado mes de octubre, Alix viajó desde Melle a Nepal para cumplir el deseo de Luis Stitzinger de quedarse en la montaña tras su muerte. Subió al Dhaulagiri 7, de 7.246 metros de altura, para esparcir sus cenizas en la cima.