El mandato del presidente Emmanuel Macron es que el nuevo primer ministro francés forme un “gobierno del bien común”. François Bayrou demostró en las negociaciones con todas las fuerzas moderadas de la Asamblea Nacional que podía contribuir a la unidad, se dice desde el Palacio del Eliseo. El resultado preliminar de las conversaciones fue que todos los partidos, excepto el partido populista de izquierda LFI y la Asamblea Nacional (RN), acordaron no derrocar al gobierno.