Películas como “Casablanca” o “El tercer hombre” se consideran atemporales, pero ¿por qué? Una de las razones de su validez a lo largo de décadas es, sin duda, que puedes verlos tantas veces como quieras y siempre hay algo nuevo que descubrir. Lo mismo ocurre con “¿No es bella la vida?” de Frank Capra. Filmada hace casi noventa años para calmar a la gente traumatizada inmediatamente después de la Segunda Guerra Mundial, al menos en el cine, la película no ha perdido nada de su fascinación.








