Con el alcance del decreto, el presidente va más allá de lo que incluso a algunos republicanos les hubiera gustado. Las conmutaciones de pena afectan a miembros de las milicias de extrema derecha “Proud Boys” y “Oath Keepers”, que fueron condenados por los delitos más graves. No llegan tan lejos como un indulto total, pero allanan el camino para que los condenados salgan pronto de prisión. Esto se aplica, por ejemplo, al exlíder de los “Proud Boys”, Enrique Tarrio, quien fue declarado culpable de “conspiración sediciosa” y condenado a 22 años de prisión por su papel central en el ataque al Capitolio. Trump también ordenó al Departamento de Justicia que abandonara los aproximadamente 300 casos pendientes relacionados con el asalto al Capitolio.
Después de que los partidarios de Trump se amotinaran en el Congreso durante horas el 6 de enero de 2021, inicialmente se consideró al republicano políticamente muerto. El mundo quedó conmocionado por este grave ataque a la democracia estadounidense. Pero a lo largo de los años, Trump ha dado forma a una narrativa de “manifestantes pacíficos” que A los detenidos se les llama repetidamente “rehenes”, y ya durante la campaña electoral se anunció el indulto para los implicados. Se llevaron a cabo vigilias periódicas frente a la prisión de Washington donde se encuentran detenidos los detenidos el 6 de enero.