Después de una vida de abuso y negligencia, este cachorro es uno de los primeros perros en una unidad K9 de Pensilvania.

Doylestown, Pensilvania. Un enérgico labrador negro llamado Zeke ha llevado su talentoso olfato a la Oficina del Sheriff del condado de Bucks, en Pensilvania.

Allí, él y su manejadora, Christina Brewerton, forman algunos de los primeros miembros de su Unidad K9. “Al principio, nuestra oficina no tenía ninguna unidad canina.” Brewerton dice: “Nos pusimos en contacto con la Hometown Foundation… Tenían un perro. Aquí tenemos al canino Zeke. Y también a una pastora alemana, Emma”.

Zeke provenía de un entorno de abuso y abandono. “Todo lo que Zeke conocía en ese momento de su vida era negligencia y abuso. Así que inicialmente nos tomó mucho tiempo construir ese vínculo y acercarnos más”, dice Brewerton. Después de que Zeke se recuperó de la crueldad animal y la desnutrición, la diputada Christina Brewerton considera que es un placer trabajar con él.

Zeke está capacitado en detección de explosivos, recuperación de pruebas y búsqueda de personas desaparecidas.